jueves, 30 de abril de 2009

Te Amo

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Te amo, te amo. Es todo lo que puedo decir.
Te adoro, te adoro. Todo mi ser confía en Ti.

Yo te amaré y te adoraré.
No importa lo que pueda venir.

En Ti Señor siempre confiaré
Y te amaré hasta el fin.

Juan Carlos Alvarado

jueves, 23 de abril de 2009

Amar o no amar ... that is the question


Hola, como andan buena junta? Espero que todos muy bien!!! Lo que voy a escribir a continuación no es una pregunta típica de los webates (el que lee entienda) sino algo que hacía falta largarlo y espero que a ustedes les interese el tema tanto como a mi.

Vieron que Jesus nos dijo: Amarás a tu prójimo. Y nuestro prójimo no son solamente nuestros amigos sino también nuestros enemigos. Nuestro prójimo son nuestros seres queridos, cercanos (familia, amigos, etc) pero también los que se cruzan a nuestro lado, los que están proximos (prójimos): el vecino cordial y el chusma, el colectivero que saluda a todos los pasajeros y el malhumorado, el jefe amable y el nervioso, el compañero de trabajo simpático y el traicionero, el cliente fiel y el demandante, y un largo etcétera de gente que se cruza por nuestro camino a diario.

A decir verdad, no es sencillo cumplir con esa consigna de amor incondicional. Creo que no hay fuerza humana (por mas buena persona que sea uno/a) que logre cumplir por sus propios medios esa sentencia, al menos de una manera constante. El tema es el siguiente y no se si ustedes estaran de acuerdo: "La gente es complicada, verdad?". Si, la gente lo es (y debería agregar) somos complicados. Pero hay un mandato que los cristianos tenemos que considerar cada minuto de nuestra vida: "amarás...".

Amar no es una palabra para tomar a la ligera. Amar implica despojarse por completo, considerar al otro (prójimo) como alguien importante, más allá de nuestra opinión personal o las cosas que haya hecho. Amar implica olvidarse por un momento de uno, para prestarle atención al otro. Amar implica extender la mano uno, aunque los demas no la extiendan por nosotros. Si queremos amar como Dios manda, tenemos que aprender a no creernos el ombligo del mundo, a dejar de lado el egocentrismo y los propios intereses y planes, tal como lo hizo Jesus al abandonar el cielo para morir en la cruz.

No digo que todo esto sea sencillo. Amar es el desafío más grande que un ser humano pueda tomar. Es más grande que el desafío de formar una familia, que el desafío de tener nuevas responsabilidades en el trabajo, que el desafío de lanzarse a una carrera unversitaria, que el desafío de desarrollar un ministerio. Esas cosas son importantes y espero que todos/as estemos enfocados en ellas, pero amar es mayor desafío porque es lo que engloba a todos los demas. Porque como dice en el Nuevo Testamento, si yo doy de comer a los pobres, si conozco todos los misterios y la profecía, si entrego mi cuerpo para ser quemado ... pero no tengo amor ... no soy nada. Por más título universitario, por más familia conformada, por más posición económica, por más cargos que tenga en donde me desarrollo ... no soy nada si no tengo amor.

Decíamos que la gente es complicada. Pero no creo que sea saludable quedarnos con esa idea, porque sino nos convertiríamos en unos amargados que lo único que hacen es quejarse por el mal estado del mundo. Si la gente no ama, y como consecuencia, no tiene paciencia, no perdona, traiciona, critica, es indiferente, es egoísta, es autoreferencial, no escucha, grita, olvida, no tiene piedad, miente, engaña, maltrata; yo no tengo derecho a dejar de amarlos a pesar de eso. ¿Masoquista? Por supuesto que no me gusta sufrir, y que no es bueno dejarse pisotear, pero ¿no es un triunfo mantenerse limpio cuando los demas se ensucian?

Y ya que mencionamos a Jesucristo, entre todos los milagros de sanidades y liberación que él realizó, ¿no creen que el mayor milagro que él hizo fue amarnos a todos nosotros, que no estamos tan lejos del listado que mencioné un poco mas arriba? Uno de mis pasajes preferidos de los evangelios es cuando el Jesús resucitado se acerca a Pedro (el traidor) y lo único que le preguntó es: "¿me amas?". No hubo ningun reproche, ningún "mirá lo que me hiciste", ningún "¿te parece bonito???". Simplemente se acercó con una mirada de amor y eso hizo que Pedro se derritiera y fuera cambiado para siempre.

¿Estan listos para tomar el desafío de revolucionar con el amor?

...ya se ... la gente es complicada ... pero hay que amarla ...!!!

Silvana Flores

Reflexión



Quería compartirles algo que me estuvo pasando en estas semanas, me parece de edificación y es la conclusión a la cual dsps de orar, ver una prédica de Madonado y pensar en esto, llegué. Es q los alagos o la "salamería" de los dones que Dios nos dá o x los cuales nos usa, bloquean el discernimiento y arruinan el corazón del hombre o mujer de Dios. Quizás a veces no nos damos cuenta y sin querer "inflamos" con palabras poco espirituales a otras personas. Ej: "somos unos grosos". Si lo dicen para edificación x q ven a la persona crecer en Dios stá muy bien pero les aconsejo, no x q uds lo hagan, cuidar nuestro corazón y el de las otras personas. Es muy importante q el enemigo no se infiltre a travéz de sto. Lo q tenemos es x gracia, nada es nuestro, " x medio de Él y para Él son todas las cosas". Los amo en el Señor!.

Mariana Balestra